PAMPA NORTE

PADRE GONZALO SEBASTIAN ZERVINO

CULTURA

PADRE ¡ BIENVENIDO! A LA PÁGINA

Les quiero comentar que hace unos días tomé contacto con el Padre Gonzalo, luego de un largo paréntesis comunicacional, fue una alegría para ambos, me prometió mantenerse informado a través del Blog  y cuando el tiempo se lo permitiese, enviar unas líneas sobre distintos temas desde su óptica como sacerdote y como siempre la palabra de ellos es atendible  y aconsejable, me permito publicar algo que lo hizo en la fecha en el muro de Facebook. Por pedido suyo,sugirió también en la página, por lo tanto espero que esto sea el comienzo de una largo camino cubierto de palabras que hacen bien al corazón de todos nosotros. Gracias por su atención.

 Lo importante

"El hombre ha dedicado una parte importante de su vida a aprender. Ha hecho grandes sacrificios para acrecentar sus conocimientos. Horas y más horas de estudio y de vigilias antes de los exámenes y pruebas que tuvieron que rendir. Y de todo ésto... ¿qué ha quedado? Muchas de las cosas que se aprendieron se olvidaron, pero algo de todo aquello se grabó en lo más hondo. Esos conocimientos configuraron en buena parte el ser y el obrar de cada uno. Pero...¿se habrá asimilado lo que en realidad era importante?. Aprendimos tantas cosas que logramos de alguna manera batir en retirada a la ignorancia en casi todos los dominios. Los profesionales han llegado a grados increíbles de especialización. Nuestra educación hizo crecer en desmesura aspectos importantes del saber y dejó en penumbras zonas indispensables para la vida

humana. Hay sabios que lo son tan sólo en una parte de ellos mismos. Espiritualmente encorvados, crecieron sin concierto, desajustando el todo. Nadie les enseño a rezar, a ser humanos,  a ser tiernos, a ser padres o esposos, a repartir su tiempo, a conocer el fin de la aventura humana...nadie les enseñó a vivir y a ser felices... nadie los acercó a Dios. Si hay tanta sabiduría en el hombre, ¿cómo es que se ignora lo fundamental?.

Cuando las fuerzas van flaqueando, el ser humano es capaz de percibir dónde está lo esencial, aquello que debe perdurar. Esta percepción rompe las reglas del aprendizaje y puede florecer cuando la memoria ya debilitada deja partir lo estudiado para abrirse a lo esencial." (Padre Gonzalo).-

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