“El sistema electoral debe ser objetivo –opinaron-. Romper con esa importante
condición es permitir que el poder de turno influya y condicione los actos
eleccionarios en su beneficio y en pos de su propia permanencia”.
“Decíamos que es una gran oportunidad para promover una
reforma que incluya un cronograma electoral que no cambie de acuerdo de las
necesidades del los gobernantes; que desdoble las elecciones nacionales de las
provinciales, instaure el voto electrónico o por lo menos la boleta única y,
por sobre todo, no discrimine a las minorías”, reclamaron.
Luego, indicaron que “votar a los 16 años aumentaría en
11.414 el número de sufragantes habilitados en el padrón electoral y, tal como
parece planteado, este sector no tendrá la obligación de votar pero si
incrementaría el número de votos necesarios para obtener los pisos electorales
en las primarías donde hay que superar el 1,5%”.
“También el 2% exigido en elecciones generales para no perder
la personería política partidaria lo cuál trae la caducidad de los partidos, no
permitiéndosele participar en por lo menos una elección, con engorrosos trámites
de afiliación para su recuperación”.
“No olvidemos que el piso electoral del 3% en las elecciones
provinciales impidió el ingreso de diputados de partidos minoritarios con 7200 y
5200 votos, cuando las bancas número 29 y 30 se consiguieron con 5000 y 4200
votos respectivamente de los partidos mayoritarios, vale decir que para el
sistema 5000 es más que 7500. No hace falta explicar lo injusto que
resulta”.
“En suma, apelando al espíritu democrático de políticos y
gobernantes, estamos ante la ocasión de producir una verdadera y equitativa
reforma electoral, que no lo sea en beneficio de un sector sino del conjunto de
nuestra sociedad”. (Maracó Digital).
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